En esta oportunidad tocaré un tema muy importante referente al suicidio, muchas veces hemos escuchado a personas decir que quieren suicidarse porque algo les va mal en la vida, porque se divorciaron, porque les fueron infieles, porque falleció un familiar, etc
Cuando nos encontramos frente a personas con pensamientos suicidad tenemos que saber reconocerlas, siguiendo estas pautas:
Si la persona amenaza con lastimarse o matarse.
Si la persona busca maneras para matarse, buscando acceso a pastillas, armas, u otros medios.
Si la persona habla frecuentemente o escribe sobre muerte, morir o suicidio.
Si la persona actúa con rabia, coraje, busca venganza.
Si la persona actúa imprudentemente o se involucra en actividades de riesgo, al parecer sin pensar.
Si la persona se siente atrapada, como si no hubiera salida
Si la persona aumenta su uso de drogas o alcohol
Si la persona se aleja de sus amigos, familia o la sociedad.
Si la persona presenta síntomas de ansiedad, agitación, no puede dormir, o duerme en exceso.
Si ante la sospecha de que alguien pueda estar en riesgo de suicidio, es importante el preguntarles directamente sobre pensamiento suicida, no es recomendable tratar de evitar la palabra suicidio, es importante hacer la pregunta sin temor, y sin expresar un juicio negativo, la pregunta debe ser directa y al punto, por ejemplo se le debe preguntar ¿Estas teniendo pensamientos suicidas?, ¿estás pensando en matarte?, encarar muchas veces puede tener un efecto tranquilizador en la persona suicida.
Es muy importante hacer conocer a la persona suicida que le importa y que desea ayudarla, expresar empatía por la persona y por lo que está pasando, exponerle de manera clara que los pensamientos de suicidio muchas veces están asociados a trastornos mentales tratables, ya que esto puede inculcar un sentido de esperanza a la persona, también es recomendable decirle a la persona que los pensamientos de suicidio son comunes y no tiene que actuar bajo ellos.
Recordemos que los pensamientos suicidas muchas veces son un llamado de ayuda y un intento desesperado para escapar de problemas y sentimientos angustiantes.
Para saber si estamos ante una situación seria , se necesita determinar si la persona tiene intenciones definitivas para terminar con su vida, un nivel alto de planeamiento un riesgo más grave. Una persona quien esta activamente suicida no debe dejarse por sí sola, si no podemos quedarnos con ella, se coordina para que alguien más lo haga, además se le da a la persona un contacto de seguridad que este disponible a todo momento (como una línea telefónica de ayuda, un amigo o miembro de la familia que ha aceptado ayudar o un cuidador profesional).
Después de que la crisis ha pasado, asegúrese que la persona obtenga cualquier ayuda psicológica y médica que necesite.